Creamos una estrategia moderna y eficiente basada en terapia psicológica y ocupacional envolvente, en los 3 factores vitales cuerpo, corazón y mente, echando mano de la espiritualidad, la meditación y el civismo, y los 12 pasos actualizados y modificados de acuerdo a las necesidades del presente.
Individual. Con el objetivo de conocer al paciente, ahondar en la razón que lo hace ser adicto a una sustancia o situación emocional, ayudarlo a enfrentar, liberar, perdonar, perdonarse y entender que existe un mañana y una vida. Al igual, para observar el avance, retroceso o estancamiento de su situación psíquica y valorar sus fortalezas tanto propias como dentro de la comunidad.
Grupal. En las cuales se lleva a cabo la comunicación, el hablar del tema, sin vergüenza ni tapujos, de forma constante con personas que están pasando situaciones similares les ayuda a sanar y a aceptar la situación actual y después a establecer una meta a la cual llegar día con día.
Familiar. Con el objetivo de ayudarlos a procesar y a aceptar la situación que están viviendo, aminorar culpabilidades y generar sentimientos de apoyo y empatía mutua y enfocarlos hacia el futuro.
Meditación. Es un ejercicio mental y físico que ayuda a convertir nuestro cerebro en nuestro aliado y herramienta positiva. Forma parte de la terapia psicológica además de ser tranquilizante y descansado. Lo incluimos en actividades.
Hacemos énfasis en las fortalezas de cada persona y en la importancia de que cada persona es única y diferente (tratamiento personalizado), fortaleciendo el autoestima, impulsando el estudio, el aprendizaje de oficios y la habilidad de crear artesanias y productos varios, para con ello facilitar la reinserción social, familiar y laboral.
El método Sanáhra se enfoca en la integración del paciente a un ambiente de actividades, talleres, aprendizaje de oficios, trabajo, educación y terapias psicológicas constantes, ordenados y organizados de tal forma que no tienen tiempo de ocio más que el que se preprograma y aun así se llena de juegos, lecturas, programas de TV, etc., preaprobados por la institución, esto se lleva a cabo con el objetivo de que el tiempo pase rápido, no tengan tiempo para pensamientos negativos y terminen el día tan cansados que puedan dormir bien (algunos tienen mucho tiempo sin dormir bien) y despierten con el entusiasmo de enfrentar un nuevo día y terminar la tarea que dejaron inconclusa.
Las actividades son agradables, hay un constante aprendizaje tanto manual como intelectual, el ambiente es de compañerismo y ayuda mutua, se trabaja en la autoestima y se explotan las fortalezas, las vocaciones y la facilidad de aprendizaje de actividades específicas, guiando a cada uno hacia lo que les genere mayor satisfacción, enfocando su atención en actividades y aprendizajes nuevos y positivos que les ayudará en su camino hacia la rehabilitación funcional.
Integramos el uso del temazcal como una terapia de relajación, aunado a la meditación y al hecho de que el calor, el vapor y el consecuente sudor ayudan de forma sorprendente a la desintoxicación del cuerpo, tanto de la o las sustancias adictivas como de las toxinas normales de la piel y el medio ambiente. Estas sesiones se llevan a cabo 2 o tres veces a la semana al inicio de su internado y con el tiempo bajan a 1 vez a la semana.
Forma parte de la terapia alternativa y del enfoque integral del método Sanáhra.
Admitir impotencia: Admitir que somos impotentes ante el alcohol, las drogas, problemas de comportamiento o trastornos de salud mental y del comportamiento y que nuestras vidas se han vuelto ingobernables.
Encontrar esperanza: Creer que un poder superior a nosotros mismos puede devolvernos la cordura.
Rendición: Decidir entregar nuestra voluntad y nuestra vida al cuidado de Dios tal como lo entendemos.
Hacer inventario: Hacer un inventario moral inquisitivo y audaz de nosotros mismos.
Compartir el inventario: Admitir ante Dios, ante nosotros mismos y ante otros seres humanos la naturaleza exacta de nuestros errores.
Prepararse: Estar completamente listos para que Dios elimine todos estos defectos de carácter.
Pedirle a Dios: Pedir humildemente que elimine nuestros defectos.
Hacer una lista de enmiendas: Hacer una lista de todos aquellos a quienes hemos dañado y hacer enmiendas a todos ellos.
Enmendar: Enmendar directamente a esas personas siempre que sea posible, excepto cuando hacerlo lastimaría a ellos o a otros.
Continuar con el inventario: Hacer un inventario personal, y cuando nos equivoquemos, admitirlo de inmediato.
Orar y meditar: A través de la oración y la meditación, mejoramos nuestra conciencia y nos conectamos con Dios. Hacemos esto para entenderlo, orando solo para que Su conocimiento nos dé el poder para llevarlo a cabo.
Ayudar a otros: Tener un despertar espiritual como resultado de estos pasos. Llevar este mensaje a otros adictos y practicar estos principios.
Los pacientes se animan unos a otros a compartir sus sentimientos y experiencias con la adicción a medida que avanzan en cada paso del programa. El objetivo es ayudar a los pacientes a experimentar un "despertar espiritual" o a hacer el cambio personal necesario para superar la adicción. Los pasos comunes en el proceso de 12 pasos que reforzamos incluyen:
Admitir que no tienes el control de tu adicción.
Reconocer que un poder superior puede dar fuerza.
Examinar los errores del pasado.
Hacer las paces.
Vivir una nueva forma de vida.
Ayudar a otros.
Si bien los programas de 12 pasos se basan en principios espirituales, el lenguaje de Dios como un "poder superior" enfatiza el cómo cada miembro lo conceptualiza, lo que permite diferentes interpretaciones y creencias. Mientras que algunos miembros creen en un Dios tradicional, otros creen en el karma, la tierra, la ciencia, la madre naturaleza, el universo, la humanidad en general o incluso en su comunidad de recuperación como un poder curativo.
La figura del padrino, la premisa de «solo por un día» y el acompañamiento por medio del colectivo parecen esenciales en su posible éxito. En general, el apoyo social es un excelente aliado para la recuperación y la permanencia en el tratamiento.
Es devolverles la confianza en si mismos y darles la oportunidad de rehacer sus vidas y demostrarse y a sus seres queridos que pueden lograrlo, día con día, con apoyo y sobre todo, que pueden ser libres y felices sin drogas.
Los tiempos mínimos de estadía para todas las adicciones a sustancias o situaciones emocionales son de 6 meses, tiempo en el cual el cuerpo se desintoxica y la reprogramación cognitivo conductual ha llegado a un punto en el cual se pueden observar los cambios de hábitos y de actitud (ya sean positivos o negativos) y en el cual el paciente visualiza, conceptualiza y planifica su vida a corto, mediano y largo plazo. Los tiempos extras se miden de acuerdo con la mejora del paciente al llegar al término de su estadía mínima. Se realiza un examen sicométrico aunado a las observaciones de actitud y aceptación de la reprogramación cognitivo conductual y sobre los resultados se procede a la baja o se comenta, con los familiares o tutores, la necesidad de un periodo de estadía mayor siempre con su consentimiento por escrito.
Sustancia o estado emocional | Tiempo mínimo de estancia |
---|---|
Metanfetamina | 6 meses |
Heroína | |
Crack | |
Fentanil | |
Anfetaminas | |
Cocaína | |
Éxtasis (MDMA) | |
LSD | |
Alcohol | |
Marihuana | |
Hongos | |
Ayahuasca | |
Depresión | |
Ludopatía | |
Sobrepeso / obesidad | |
Anorexia / Bulimia |